Don Ricardo mantiene la mística de trabajo, característica que su padre le dió a FUSAL. A medida la fundación fue creciendo, los estándares se fueron elevando. Con mucha pasión y acompañamiento Don Ricardo fue convirtiendo a FUSAL en una organización sólida, transparente y eficiente. Su liderazgo empresarial junto con un gran sentido de responsabilidad y solidaridad, ha permitido que FUSAL crezca y se consolide de manera consistente.