Con el apoyo de: 

Se brinda apoyo a la red de salud pública, clínicas asistenciales y organizaciones que brindan atenciones en salud a poblaciones vulnerables.

Se desarrollan acciones complementarias a otros programas de FUSAL y se brindan bienes como alimento, ropa, calzado y artículos de higiene a organizaciones que intervienen en comunidades y poblaciones en necesidad.

Se brindan artículos de primera necesidad a personas en situación de desplazamiento, afectación por fenómenos sociales o climáticos, así como individuos que se encuentran en albergues temporales.

Esto a través de la gestión, principalmente internacional, de insumos como: medicamentos, suministros médicos, ropa, calzado, productos de higiene y cuidado personal, alimento, material educativo, sillas de ruedas, insumos ortopédicos, equipo agrícola, entre otros. Esta labor se realiza en conjunto con la fundación hermana de FUSAL, la Salvadoran American Humanitarian Foundation (SAHF), radicada en Miami, Estados Unidos.

A lo largo de su historia, FUSAL ha distribuido más de $874 millones en donaciones a una red de 630 beneficiarios entre los que destacan hospitales y otros establecimientos de la red de salud pública, clínicas de interés social y municipales, organizaciones sin fines de lucro en el ramo de la salud, centros de cuido de adultos mayores y niños, centros escolares, instituciones dedicadas a brindar socorro y rescate, organizaciones comunitarias, y comunidades vulnerables de nuestro país que se atienden a través de los otros programas sociales de FUSAL

La fibrosis quística es una enfermedad genética que causa que los pacientes que la padecen presenten diversos padecimientos respiratorios, dificultad para absorber nutrientes de los alimentos y otros problemas digestivos, afectando su salud en general. En nuestro país, recientemente la esperanza de vida de estos pacientes ha incrementado de los nueve a los 15 años, en promedio; sin embargo, a nivel mundial, su esperanza de vida puede llegar a ser superior a los 45 años.

Durante 2023, FUSAL contribuyó con 75 pacientes con fibrosis quística a través de la gestión de diversos donativos para mejorar su calidad de vida, tales como: medicamento para combatir infecciones, suero y alimento fortificado, entre otros. Además, movilizó más de $20 mil para brindar acceso a 52 pacientes a pruebas genéticas las cuales permitirán un tratamiento más oportuno a dichos pacientes.

Adicionalmente, con el apoyo de su donante Direct Relief y su fundación hermana SAHF, FUSAL movilizó un tratamiento innovador para pacientes elegibles, de acuerdo a su mutación genética, el cual se prevé que se les empiece a administrar en 2024 para incrementar su esperanza de vida en al menos 15 años.

De manera coordinada con el Hospital Nacional Rosales y el Hospital de Niños Benjamin Bloom, en 2023 FUSAL contribuyó con los pacientes con hemofilia. La hemofilia es una enfermedad genética que causa que los pacientes que la padecen, todos del sexo masculino, presenten problemas de coagulación y, por tanto, los vuelve vulnerables ante golpes, caídas o cualquier hemorragia, la cual podría ser potencialmente mortal.

Alrededor de 300 pacientes con hemofilia recibieron gracias a FUSAL, 20,684 viales con Factor VIII, componente necesario para regular su coagulación y que puedan gozar de una mejor calidad de vida y desarrollar todas sus actividades normalmente.

Se distribuyó alimento fortificado, vitaminas y desparasitantes a familias en pobreza multidimensional beneficiarias de los programas de FUSAL, hospitales y clínicas asistenciales, mediante donativos valorados en $1.7 millones, lo cual benefició a 45,132 personas, siendo 22,546 niñez y adolescencia y 22,586 adultos.

A través de nuestro programa de movilidad, se impactó la vida de 1,685 personas con discapacidad con la distribución de sillas de ruedas, andaderas, insumos para terapia, inodoros portátiles y equipo de protección personal valorado en $1.2 millones. En 2023, FUSAL amplió su programa de movilidad incorporando tres organizaciones como socios subdistribuidores de sillas de ruedas (Fundación Campo, Fundación Tacuzcalco y Red de Sobrevivientes), capacitadas por el personal de FUSAL para el aprovisionamiento adecuado de sillas, principalmente en Morazán, Usulután, Sonsonate y Ahuachapán.

En 2023 FUSAL benefició a 2,571 personas directamente al dar respuesta a tres emergencias a nivel nacional: incendios en La Libertad y Usulután, Tormenta Tropical Julia y Tormenta Tropical Pilar, así como la continua crisis humanitaria de salvadoreños retornados. Se distribuyó en este contexto más de $125 mil dólares en bienes de primera necesidad tales como: kits de higiene, ropa, calzado, colchonetas, artículos de bioseguridad, alimentos, entre otros.

Asimismo, FUSAL fue escogido como miembro del Comité Ejecutivo del Equipo Humanitario de País (EHP) este año. FUSAL colabora activamente con el Equipo Humanitario de País desde 2020 para contribuir a la coordinación efectiva de la labor humanitaria con las instituciones referentes del Gobierno de El Salvador frente a un desastre. Se encuentra activo en los clusters de alojamiento para emergencias, salud, nutrición, WASH y seguridad alimentaria. Como parte del EHP, FUSAL participó en la elaboración del Panorama de Necesidades Humanitarias para el Salvador y el Plan de Respuesta Humanitario y reportó en la plataforma oficial del EHP sus actividades de respuesta y atención a emergencias durante el año, representando 11% de los artículos donados en ese período.

Este proyecto logró apoyar la distribución de 580,824 raciones de alimento durante seis meses a familias lideradas por mujeres en ocho municipios de Morazán. Se formó a 104 voluntarios comunitarios en equidad de género en el hogar y a 92 voluntarios comunitarios sobre consejería y vigilancia nutricional y estimulación temprana. 

Como fortalecimiento a los Nutripuntos del Programa de Primera Infancia de FUSAL en Morazán, se logró equipar 56 espacios comunitarios con kits de preparación de alimentos (cocina, sistema de gas y gas propano) para que las familias aprendieran recetas saludables con el alimento fortificado previsto, manuales de buenas prácticas alimenticias y recetarios para las familias, así como kits para favorecer la distribución equitativa de las tareas del hogar e involucramiento de padres y madres en la crianza de sus hijos. Este proyecto impactó a más de 2,000 familias con niñez menor de cinco años. Este proyecto se implementó entre noviembre 2022 y febrero de 2023.

Se apoyó a 1,400 familias identificadas en necesidad en los municipios de Berlín y Puerto el Triunfo en Usulután, quienes recibieron transferencias por $360 para contribuir con su seguridad alimentaria. La selección de familias favoreció que recibieran apoyo hogares monoparentales, especialmente con mujeres como jefas de hogar, mujeres lactantes o embarazadas, niñez menor de cinco años, personas con discapacidad, adultos mayores y sin ingresos permanentes o formales recibieran el apoyo. Además, el personal desarrolló distintas capacitaciones para promover la inversión de los fondos en alimento y actividades productivas entre las familias.

En coordinación con OPS, se organizaron actividades de fortalecimiento de capacidades a prestadores de servicios de salud, especialmente del Ministerio de Salud en temas de inmunizaciones, farmacovigilancia y cadena de frío. FUSAL apoyó a OPS en la logística, administración y comunicaciones del proyecto que logró formar a 933 personas parte del sistema de salud pública a través de 19 jornadas educativas, la provisión de materiales para su aprendizaje y el desarrollo de audiovisuales para documentar dichos procesos.

FUSAL apoyó la labor de UNICEF en el proceso de fortalecimiento de los conocimientos de 501 prestadores de servicios de salud en vigilancia nutricional, especialmente en los departamentos de San Miguel y Usulután, a través de jornadas de capacitación sobre toma de medidas antropométricas y cuidados nutricionales para mujeres embarazadas y niñez. Entre las actividades apoyadas están la juramentación de 386 consejeros y consejeras en lactancia materna y la actualización de 289 educadores prenatales en sus conocimientos a partir de la nueva Política Nacer con Cariño y su marco legal aplicable.

Se distribuyó alimento y medios de vida para cinco familias de la comunidad Hoja de Sal en Santiago Nonualco, que viven en pobreza multidimensional. Las familias se caracterizan por ser hogares monoparentales con mujeres jóvenes como jefas de hogar, quienes deben buscar alternativas para brindar un sustento a sus hijos, pero no pueden entrar al mercado laboral por razones de cuido. A través de este apoyo se brindó capital semilla en especie para que puedan desarrollar emprendimientos, tales como venta de comida o preparaciones alimenticias, venta de animales de granja, entre otros.